Hoy en día nos encontramos ante una situación de concienciación medioambiental creciente. Las empresas cada vez más llevan a cabo nuevas iniciativas para poder alcanzar un desarrollo sostenible, es decir, un desarrollo en concordancia con el entorno que les rodea. Estas nuevas iniciativas, en cierto modo son convertidas por parte de la Administración, los clientes y la sociedad en general en obligaciones y requisitos.
Como consecuencia, a nivel empresarial, las empresas independientemente de su tamaño o localización geográfica, tienen que cumplir con un mayor número de exigencias ambientales. Para integrar el medio ambiente en la gestión empresarial, es necesaria la utilización de determinadas normativas que contienen los pasos a seguir para una correcta implantación de lo que se conoce como un Sistema de Gestión. Por lo que las empresas han empezado a priorizar la implantación de sistemas de gestión medioambiental sostenibles para la organización.
La implantación de herramientas de gestión ambiental permite reducir costes y asegurar el cumplimiento de la legislación en esta materia. De esta forma las empresas socialmente responsables formalizan su compromiso mediante estos sistemas de gestión.